Mantener los hábitos de sueño de sus hijos mientras viaja
Muchos padres pueden comenzar a preocuparse por si viajar con sus pequeños arruinará los hábitos de sueño que tanto han trabajado para establecer. Ésta es una preocupación totalmente válida. Viajar es una tarea complicada cuando intenta mantener a su hijo en un horario de sueño. Siempre está sucediendo algo emocionante, amigos y familiares que están ansiosos por ver al bebé, y otros que no tienen idea de cuánto has trabajado para que tu pequeño duerma toda la noche. Pero aunque esté fuera de casa, los bebés y los niños pequeños necesitan dormir bien. Si estás comprometido a mantener algunos hábitos de sueño saludables mientras viajas (mientras te diviertes mucho), ¡es totalmente posible! Con una planificación estratégica y límites firmes, puede mantener el sueño en el buen camino sin importar el destino.
De un vistazo
Cómo mantener buenos hábitos de sueño mientras viaja con su familia.
1. Comience con un niño que haya descansado bien.
Incluso antes de viajar, con frecuencia corremos, atamos cabos sueltos y nos preparamos para nuestro viaje. Si está transportando a su hijo de un lugar a otro, esto puede deshacerse de la gran rutina de sueño que tanto ha trabajado para crear. Haga todo lo posible por concentrarse en las siestas y en la hora de acostarse temprano en la semana previa al viaje para evitar comenzar su viaje con un déficit de sueño. Comenzar con un niño bien descansado lo preparará para el éxito desde el principio.
2. Planifique las adaptaciones estratégicamente.
Cuando planifique dónde alojarse durante las vacaciones, ya sea en un hotel, con la familia o en un Airbnb, su mejor opción siempre será la que le permita tener el mayor control sobre su entorno. Mantener el espacio para dormir de su hijo lo más cerca posible del espacio de su hogar es una de las consideraciones más importantes al planificar el sueño exitoso.
Si su pequeño está acostumbrado a dormir en su propia habitación, compartir la habitación durante las vacaciones puede ser abrumador y provocar noches difíciles. Si se hospeda en un hotel, intente reservar una habitación con un área adjunta o una habitación separada. Sé que esto no siempre es posible, por lo que un vestidor grande o incluso un baño también pueden funcionar bien (¡siempre y cuando haya buena circulación!). Si se queda con amigos o familiares, hable con ellos con anticipación acerca de tener Espacios separados para dormir. Las oficinas en casa funcionan bien como guardería improvisada.
Mantener el espacio para dormir de su pequeño es el mejor de los casos para garantizar que todos duerman bien por la noche. Si los espacios separados no son una opción, intente poner al menos cierta distancia o alguna barrera entre su cama y el espacio para dormir de su hijo. Incluso puede intentar crear una partición en la habitación para que su hijo no pueda verlo desde su cuna o cama. (¡Los clips grandes para carpetas y una hoja de repuesto pueden hacer maravillas!)
3. Lleve artículos familiares.
Ya sea que se dé cuenta o no, el entorno de sueño de su hijo es una gran señal para dormir bien. Hacer que su entorno sea lo más similar posible a la guardería de su hogar o al dormitorio del niño será de gran ayuda. Traiga su máquina de sonido, el amor favorito de su bebé, incluso sus propias sábanas de cuna. Todo lo que les resulte familiar y les recuerde el entorno para dormir de su hogar les ayudará a dormir en su nuevo entorno.
En la misma línea, la oscuridad ayuda a mantener el sueño en el camino correcto, especialmente cuando se viaja a través de zonas horarias. Si no está seguro de si su alojamiento será lo suficientemente oscuro, planee viajar con cortinas opacas portátiles. También soy un gran admirador del SlumberPod, una situación similar a una tienda de campaña que puede superar un Pack ‘n Play para crear un espacio oscuro (y privado) para dormir para su hijo. En caso de apuro, papel de aluminio o papel de construcción pegados a las ventanas también pueden funcionar bien.
4. Mantenga una rutina constante.
Una rutina familiar para dormir y dormir la siesta le indica a su hijo que es hora de dormir. Mientras viaja, el horario es un poco inestable y el entorno es diferente, una rutina reconocible para la hora de acostarse puede ser de gran ayuda para que su hijo se calme y se duerma con facilidad. Traiga los libros que suele leer y cante las canciones que suele cantar. Mantener los mismos hábitos de sueño mientras viaja en el mismo orden que en casa ayudará a su hijo a sentirse cómodo, incluso en un lugar nuevo.
5. No olvide divertirse.
Si por lo general tiene un gran sueño en sus manos, o es bueno seguir una rutina en casa, permítase relajarse y disfrutar de sus vacaciones. Priorice el sueño cuando pueda, pero no pierda la cordura. ¡Tu pequeño se adaptará y podrás volver a la normalidad cuando llegues a casa!